La clase de 6º ya ha vuelto de su viaje virtual europeo.

Como ya os comenté hace unas tres semanas nuestros alumn@s de sexto curso iban a comenzar un paseo por Europa como forma de intentar trabajar todos los contenidos curriculares de una forma distinta a la habitual o tradicional.

En la entrada anterior ya os dimos las claves del proyecto y os explicábamos en qué consistía, indicando que tras un trabajo cooperativo de quince días, cada grupo elaboraría un diario (con unos contenidos previamente pactados) con los pormenores y anécdotas de dicho viaje (de unos 3000 kms. aproximadamente). Os recuerdo que los destinos eran:

• El castillo de Trakai (Lituania).
• El parque Piatra Craiului (Rumanía).
• El castillo Nido de Golondrina (Ucrania).

Imágenes de los tres destinos elegidos por los alumnos.

Desde hace varios cursos (tres concretamente) estamos intentando trabajar y aprender de una forma distinta a la tradicional, y sin olvidar todo lo bueno y eficiente de cómo hemos aprendido durante estos años, estamos en estos momentos intentando implementar otras metodologías más activas. De esta forma intentamos llevar a cabo el modelo flipped classroom (clase del revés) enriquecido con la elaboración de proyectos (como este que nos ocupa) y el trabajo cooperativo. Y creo que el camino iniciado está siendo el correcto, y no lo digo yo, también lo creen mis alumnos y los resultados que estamos obteniendo.

Por supuesto que no todo es de color de rosa, en este proyecto han tenido errores, fallos, cosas y aspectos que deben mejorar (como el trabajo colaborativo, la presentación del trabajo de forma oral, errores en los contenidos trabajados, ...), pero lo que si es cierto es que han trabajado con motivación, con ilusión y con una gran dosis de "independencia" y "autoformación". Han investigado, han inventado, han redactado, han compartido su trabajo final y han aprendido aspectos de Europa más allá de lo que les podría haber dicho (en una charla anodina y pasiva) su maestro. No se si lo habrán aprendido para el resto de su vida, pero si se que durante un largo tiempo (más allá de lo que lo harían en un examen tradicional) no van a olvidar los paisajes que han conocido, los ríos, los monumentos y los distintos países por donde han pasado.

Su producto final es el que os muestro a continuación y es el resultado de sus quince días de viaje "virtual".

Grupo 1

Grupo 2

   

Grupo 3

 

Por supuesto que no son trabajos perfectos y que tienen cosas y aspectos a mejorar, pero teniendo en cuenta que llevan trabajando de una "forma diferente" desde septiembre y que están conociendo y practicando con las aplicaciones de google, creo que es un muy buen comienzo.

Y queda, bajo mi punto de vista lo mejor de todo, la EVALUACIÓN, algo que les suele poner supernerviosos, en esta ocasión también ha sido distinta. Teniendo en cuenta que contaban con una rúbrica donde tenían claro qué aspectos se iban a valorar en este trabajo.

Rúbrica previa (confeccionada con Corubrics de Jaume Feliu).

Después tuvieron que autoevaluarse y coevaluarse entre ellos, por lo que la nota final no ha sido solamente la decisión final de su maestro, sino una suma de varios puntos de vista. Y la verdad es que, aunque parezca sorprendente, han sido bastante exigentes con ellos mismos, por lo que de esta forma también trabajamos aspectos formativos que tienen que ver con la responsabilidad y la honradez de cada uno de ellos.

Rúbrica cooperativa (confeccionada con Corubrics de Jaume Feliu)

Y tras esas distintas evaluaciones... la REFLEXIÓN. Creo que en este aspecto está el verdadero aprendizaje, han sabido asumir sus errores y sus fallos, además de valorar sus aciertos y su ilusionante trabajo (en la mayor parte de los casos).

Conclusión: El modelo flipped funciona, sobre todo porque va acompañado de un trabajo activo y enriquecedor.

Seguimos trabajando.